Recetas apócrifas
Fiesta clorofílica
untada con sangre de aceitunas
vinagre con
perfume a estragón
y otras especies,
la ensalada
gloriosa coreografía
del apio y la cebolla
invitados el queso
y algún huevo
con un sol coagulado
en medio de la jungla.
Lemon pie
El lemon pie
es una garza
que se sostiene en una pata
es una nube dulce
anclada en el hojaldre
un beso de comunión
un aria alabando la gracia
de estar vivos.
El lemon pie
es una playa cítrica
es toda la espuma
un santuario de azúcar y alegría.
La sopa
La circunstancia lacustre de la sopa
cráter de vapor de apio
perfume redondo
anclado en la cebolla.
El agua
El agua en una copa
ensancha la luz
las fronteras de la sed
se iluminan de pronto
lluvia derramada
que ahuyenta la sequía.
El pan
El pan
es un país de trigo
una luna amasada y de fuego
el perfume de maderas dormidas
la luz de esta mañana
la fe de unas manos
sacramento de las bocas con hambre.
La pizza
La pizza
es un recuerdo
todo en ella es muy antiguo
luz sólida en la piedra
descubriendo la inocencia blanca
de la harina
guardada virgen en la espiga
desde hacía millones de lunas
la pizza es pura arqueología
soles de bolsillo rojos en América
viajaron un día en una caravana
de ladrones y falsos catequistas
y llegaron un mediodía de verano
a los campos de los tatarabuelos
de mis nonos.
La pizza perfumada
con el olor mediterráneo del óregano
el perfume montañoso del tomillo
la suavidad fragante de la albahaca.
siempre adolescente,
de las anchoas submarinas y verdes
de los morrones como frutas
de la bendición cremosa
de la muzarella.
La pizza ya existía
en el planeta
antes de que nosotros viniéramos a verla
en las mesas campesinas
olor del humo de la leña espinosa
aquella Italia que no era Italia todavía
era la ingenuidad de la harina
la potencia solar del ajo y el tomate
las anillos planetarios después de la cebolla
el aceite de oliva generoso
la pizza es un recuerdo
un cuento transmitido sin apuro,
es la fe de las manos
la luz antigua de la tierra.
Origen del arroz con leche
El arroz con leche
es originario de la luna llena
de allí bajó un día
hasta la India
a fuerza de ceremonias y conjuros
recibió sus esencias
navegó en barcas por el Ganges
noches de incienso ardiendo
en el agua adormecida
y por cosas del destino
fue a dar una región
ignota de Malasia
donde el arroz fresco
se incorporó definitivo a la receta
no faltó quien dijera
que hacerlo probar
por otra gente sería bueno
y así marchó a otros territorios
donde los holandeses
traficaban hacia Europa
todo lo que llegaba a sus manos
sedientos de riquezas
el arroz con leche
llegó entonces a Holanda
donde fue bautizado
por la leche de las vacas nacionales.
fue ahí luego de un tiempo
que el postre itinerante
decidió que buscaría un destino
más a su medida
en esta tierra
y marchó como polizonte
a bordo de un barco
que lo dejó una mañana de domingo
en el Río de la Plata
donde 2 negras cocineras
lo adoptaron
como a un huérfano
y le agregaron
un toque de canela afrodisíaca
desde entonces
se dice que es un postre
de estos lares
aunque como ya les he contado
el arroz con leche
es un plato originario
de las regiones
más claras
de la luna llena.
Medicina alternativa
El tai-chi
el romero en el mate
en todo lo que puedas romero
tomar aire
salir a ver a alguien
esperar que pare la lluvia
mensajes con onda
Power point tecla espaciadora
el lexotán
de a uno, de a dos
la ensalada de litio
llegó el Azeprax
vino el Prozax
a salvamos a todos
el sudor en las manos
una semana sin domingos
una primavera oscura
Aurorix a la provenzal
el perejil y sus vitaminas salvadoras
una asamblea de naranjas
sólo de mañana su jugo
de noche son de plomo
los antioxidantes
la vitamina E subliminal
los brotes de soja en la bañera
la lecitina untada en las rodillas
el aceite de jazmín perfumando las lámparas
flores de Bach
cubriendo los pianos anodinos
la calma
la consagración del tilo
el velorio de los lunes
los lunes somos Borg
Clingon los viernes
nubes de incienso
el sándalo quemando atardeceres
la esencia de marcela
la luz de sus flores amarillas
la espada de San Jorge
al mediodía
las semillas de la Reina de la Noche
tu carta que no llega
el horóscopo certero
las predicciones chinas
ordenar los elementos
las puertas
los colores
las ventanas
feng-shui
familia de perfumes
sitios de la fe
o de la alegría
la metafísica
la ruta del zen
6 porros al hilo
el dandelion tonificante
pedir en secreto a Dios
el encuentro casual
el que nos salva
la soledad que nos devuelve
a nuestro territorio
la palabra exacta de un amigo
el último beso
perfumado de mar
de luna y de universo
el último cuento del libro
de Cortázar
“Women” de John Lennon
la bandera en alto
el Peyote Asesino
incendiando los domingos
el collar de amuletos
apretados en el bolsillo
toda la gente que nos quiere
toda la desmemoria
la irremediable estupidez a veces
el amor reincidiendo
el sol cada mañana.
Recetas apócrifas 2
Comer mandarinas al sol
mejor en domingo
caminar descalzos en la arena
abrir las ventanas con cerrojo
que corra el aire en la penumbra
el viento entero
como un cielo
el campo, el territorio dividido
los perfumes a carqueja y a eucaliptos
todos los cerros en hilera.
salir temprano
descifrar los signos escritos en las nubes
respirar el primer aire
bañarse en la primera claridad
recorrer sin parar
saludar a los perros
a los caminantes sin aliento
comer liviano
pan negro
el arroz integral Mirokumai
granos casi redondos
japoneses
el equilibrio
la primavera del brócoli
las zanahorias caroténicas
el germen de trigo y sus poderes
fibras ecuménicas del zapallo y de la acelga
a la hora de la sangre
regresan las lentejas y el churrasco
esporádicamente
omega 3 desde la Antártida
viene el krill oceánico y magnífico
agradecer al guiso su tibieza
sus papas simples
el perfume del orégano
el oro tierno en cada choclo
el arroz irrestricto
los fideos subfluviales y atentos
sonreír para adentro
ver lo mundo que somos
mirarnos las estrellas
ser la noche en la noche
peces de luz
surcando el mediodía.
Panqueque
El panqueque sueña que vuela
matrimonio feliz de harina, leche y huevo
especie aérea de ternura
vuelve al sartén
a dorarse apenas en manteca
y proponer sus aromas
preparando el mediodía
luego llegará la ceremonia
la simbiosis arrollada
con la crema de choclo
la salsa blanca y su bautismo
la carne, el ají, la sal y el ajo
férrea la espinaca con fe la rúcula
llegará la salsa hija del tomate generoso
llovizna de tomillo
granizo de queso semiduro
el soplo audaz de la pimienta
la fuente está en la mesa
y a disfrutar los canelones.
Ensalada
Luz laminar que la tierra madura
envoltorio concéntrico
verdor de la frescura
la lechuga
se deshoja
se ofrenda
en el verano
cae liviana y húmeda
recostada inmóvil al tomate
bajo la llovizna de vinagre
llega solar el aceite
gota a gota
la lechuga es un ave dormida
una repetición al infinito
un principio claro
un diccionario
completamente verde.
El guiso
El guiso es una escuela solidaria
donde aprendemos
a compartir el sabor de la pobreza
tibia en cada plato
la fe que aún alumbra
el dolor del esfuerzo no reconocido
el guiso es una raza gastronómica
una forma de compañerismo
donde nos enseñan a poner el hombro
a dejarnos de pavadas
es el turno del arroz ahora
llegaron en andas las cebollas
asoma un poco de pulpa algunas veces
y entra como una reina
luego el orégano intercede
contribuye el pimentón ruborizado
el sabor que realza el choclo
o un puñado de arvejas inmaduras
el color va por cuenta de las zanahorias
o del perejil rociado
cuando el guiso ya reposa
no olviden los tomates
ni una tirita de panceta perfumada
siempre hay una abuela
que lo hacía mejor
una bien sequito y con chorizos
otra con habas cada tanto
en vez de orégano tomillo
la que lo hacía con fideos cortaditos
que así se llaman los cucuzú por estos pagos
el guiso es una convocatoria
a descubrirnos de nuevo como hermanos
sin faltas pretensiones
trabajando juntos
en torno a una mesa
cada uno pondrá algo
hay guisos ecuménicos
que alegran mesas generosas
donde siempre hay lugar
para uno más
hay guisos minimalistas
que se agotan en 3 platos
guisos de garbanzos y porotos
hay de lentejas calentitas
guiso de habas suculentas
guiso frío
que los gurises comen
cuando vuelven de la escuela
el guiso es una historia
una receta colectiva
es la esperanza terca
humeante en cada plato.
Bienvenidos todos y a brindar
ya está servido el guiso
compañeros.
Sandwich
Bienvenidos al infinito
el pan de sandwich
es una llanura ilimitada
un territorio receptivo
un escenario imaginario
todo viajero que allí recala
es admitido
entre dos panes
siempre habrá posada
para el hambre sin rumbo ni consuelo
el jamón maduro y sustancioso
el queso manjar lunar y suave
el atún submarino
la manteca
la mayonesa luminosa
se admiten los morrones
que se acerquen la cebolla
los pickles variopintos
descarozadas aceitunas
que vengan las alcaparras
el pollo sazonado
el lomo dorado vuelta y vuelta
los hongos perfumados y lluviosos
soleada la mostaza viril y gala
la salsa ketchup adolescente y súbita
que no falte
horizontal la lechuga
galáctico el tomate
radial y fértil
acá hay lugar para todos
el sandwich es cosmopolita
babilónico, ecuménico
delicia portable, sabores trashumantes
el lomo canadiense perfumado
el paté perfecto y el salame intenso
el queso roquefort afrodisíaco
el queso crema
la manteca de maní
la sal de ajo
¡a los confines!
a cruzar los páramos
del hambre nocturna
bajo la luna
o el absorto mediodía
el sandwich
o refuerzo simplemente
viene con nosotros
receta inabarcable
entre dos panes universo.
Aceitunas
Las aceitunas son miniplanetas paradójicos
gotas de lava, brotes de luna
cuerpos untuosos en una jungla verde
agua del sol mediterráneo
historia de las manos que dibujan el trabajo de la
tierra
úteros fértiles que el verano bautiza.
Recetas apócrifas 4
The Revival of Kama Sutra
regresa el Ananga Ranga
los tomos centenarios
sofocados de erotismo
de pétalos rojos y sedas perfumadas
el mercado devaluado
del sexo intrascendente
trivial y trashumante
la búsqueda sin rumbo
de consuelos baratos
cuerpos descartables
bailongos olvidables, 2 o 3 cervezas
recuerdos sin futuro
las revistas coloridas
sus tapas insinuantes
el sexo al desayuno
moda media estación
redecorar la biblioteca
cómo sacar manchas de la alfombra
los astros
las feromonas
las cartas enigmáticas
la adivina virtual
el 0900
las máquinas de dar consejos
recetas apócrifas
contra la mala vida
excusas extenuantes
velando tanta muerte.
Recetas apócrifas 5
“and you will do
as you are told
until the right to you are sold”
The Slime – Frank Zappa
Trabajar 16 horas
la cola para el pasaporte
la abuela por internet
la webcam
el cumpleaños con ADSL
juntar la plata como sea
comprar un auto usado
encerarlo
y que parezca como nuevo
sacarle una foto
mandarla como attachment
que bien la vea tu hijo
trabajar sin documentos
agachar la cabeza
comprar lo que se puede
comprar las vidrieras
los marcos
el supermercado entero
comprar en dos turnos
¿después qué?
Federal Express
el tema es comprar algo
patear la angustia hacia delante
llegan los envíos
las veredas con rutas
para los visionarios del consumo
para los visionarios del consumo
hay que tener lo que todos tienen
lavado de cerebro colectivo
sociedad burocrática
de consumo dirigido
¿cómo ser feliz sin comprar algo?
necesitamos una tarjeta
Master, American, Visa
un crédito por favor
imploramos
un viaje allí a
donde
todos viajan
a donde todos
dejan
sus tontas miradas
sobre los íconos perecederos
que alimenta e inflama
el gran padre sistema
el imperio
el Tiranosaurus Rex
¿Cómo vivir sin la moda
que nos lleva por las galerías
glamorosas de la dicha?
las revistas, los programas
lo que debe ser usado
los colores
lo que sí y lo
que no
no hace falta pensar
en el mundo del consumo
no hay esfuerzo
sólo se trata de conseguir la plata
sólo se trata
de ese pequeño orgasmo sofocado
llegar a la caja
pagar y llevar lo que nos han
dicho que compremos.
Alfombra persa
Como no tengo una técnica mejor
que mi timidez completa
no encuentro nada más efectivo
que prometerte un camión de chocolates
robado en un descuido
a algún repartidor
aburrido y cansado
de tanto kiosco
y tanto invierno
así te llevaría
hasta un sitio
donde cuelgan todas las telas
de todos los colores imaginables
y todos los diseños
donde entra el sol
de cien primaveras
y en una alfombra persa
te invitaría a brindar
con un vino añejo y simple
por un viaje
que me gustaría hacer contigo
si me permitís y te apetece
claro está
que te convide primero
con uno de esos chocolates
robados furtivamente
para conmoverte.
No estaría mal
Podríamos volver
a aquel sitio
al que nunca hemos ido todavía
podríamos dejar que nuestras manos
se digan lo que ya saben
tu mirada y la mía
y en silencio
refugiarnos a saborear la noche
llena de reflejos
de descubrimientos
y caricias
no estaría mal
navegar sin apuro
por el mar
de tu perfume suave
y recalar en tus labios
y perderme
como se pierden
en el viento
todas las palabras
que he inventado
para amarte.
Arcobaleno
El amor es una catarsis enzimática
un vuelo rasante sobre volcanes olvidados
una palabra menoscabada y exprimida
una locura aún más loca que las otras
el amor es una tormenta de colores
el principio de todo lo que existe
el caos que encuentra un equilibrio
el amor es luz en llamas
cuando todo está oscuro y apagado
el amor es un río electroacústico
una guitarra hecha de agua sumergida
el amor es un sitio
hacia el que muchos peregrinan
pero pocos llegan
el amor es una bandada de pájaros despiertos
atravesando tus sueños en la noche
el amor es un maizal donde madura la luna
la bahía que eligen las ballenas
y los barcos mal heridos de huracanes
el amor es una ráfaga
en un mar de campanas aburridas
el amor es un río subterráneo
que un día descubrimos
es un eclipse en la cima de verano
es lo que no iba a ser y fue
la raíz que descubre su copa
el agua que sube hasta el origen
el sol en la sonrisa
la fiesta interminable
de las flores, nuestro arcoiris.
Tormenta
Hay olor a tormenta
después vendrá la lluvia
tu vientre es una cuenca
por tus piernas suben ríos
corriente abajo yo navego
busco el remanso de tu delta
donde tu sombra me ilumina
remolino que retiene mi aliento
hay olor a tormenta
y toda la luz se ha replegado
está flotando ahora adentro
entre tu piel imaginada
y la roca ilusoria
que esculpe mi memoria
tratando de dar forma
nuevamente
a tu imagen imposible
emigrante y vacía.
Gabrovo
La discoteca del espacio juvenil
la fábrica textil de Gabrovo
la barra, la pantalla gigante
la muchacha búlgara
preguntando ¿kak se kasva?
mis manos buscando anclaje en su ternura
la luz balcánica derretida
en la nieve.
Búsqueda
Tus piernas
dos ríos de sombra
que confluyen
allí late el rubí encendido del deseo
húmedo como un fuego
desafiando la lluvia
tu forma
cambia
música convexa
como un saxo
cada nota
cada abrazo
navega tu ternura cóncava
me pierdo en tu misterio
te refugias en mis brazos
y seguimos buscando geografías
en el aire
en la fe de la vendimia
la fiesta prometida
en tu mirada.
Playa oeste
El viento del oeste
insistía en su
cruzada patagónica
remotamente andino
ciertamente transcordillerano
y envolvía los silencios de la noche
aseguraba su insistencia
sobre la piel oscura del río
frío y secreto
mientras vos y yo
navegábamos corriente arriba
en una nube
recién inaugurada
milagrosa
invulnerable
hecha de las gotas
de luz suave de tus ojos.
Encuentros
Tan lejos y tan cerca
¿cuál es la diferencia?
aunque estuvieras en Kamchatka
me reiría atrozmente
leyendo tus correos
apurando las mañanas
para llegar a un ciber
y encontrarte
tan cerca y tan lejos
¿cuál es la diferencia?
hace tiempo
que andamos por el mundo
que andamos por el mundo
ya nos es familiar
toda la escenografía
y si bien no hemos visto
todo el catálogo de obras
ya tenemos oficio
en este arte de andar vivos
atravesando tanto circo de la muerte
tanta selva feroz
que nos reniega
está la cuestión de los espejos
de unir todos los fragmentos
después de tanto terremoto
y que sea una sola la imagen el reflejo
es tan curioso
me digo a veces
haber estado tanto tiempo
sin reírnos de todo
sin haber hablado sobre
cosmogonías apócrifas
ni personajes caídos en desgracia
sin haber compartido tantos cafés
y tantos discos
fue así, eso es todo
pero me hubiera gustado otra versión
de la película
tan lejos y tan cerca
yo no quería despedirme
la otra tarde
pero aunque el sabor fuera a poco
tenía que volver
hasta este sitio
desde donde hoy te escribo
algunas cosas
sobre la distancia
y los encuentros
sobre todo
cuando de algún modo
nunca he dejado
de estar cerca de tu risa.
Semana
Los miércoles me gustan
porque tu risa
ríe en mi mirada
y las plantas y el patio
casi abandonado
nos observan reír
como bestias excéntricas
matinalmente lúdicas
me gustan los jueves
y también los viernes
porque me has prometido
que charlaremos siempre
largo y tendido
mientras tu risa
ríe en mi mirada
me encantan los sábados
porque al otro día es domingo
y siempre nos llamamos
y te siento reír
en el teléfono
y tu risa ríe en mi mirada.
Circa
Cerca de vos
el aire regresa
a aquellas plazas
donde a veces hay fiestas
y las palabras
recobran
esa luz interior
conjuros y señales
y un cielo prometido
cerca de vos
vuelvo a mí
por un atajo soleado
y me dan ganas
de quedarme
cerca de tus playas
recalar en tu alegría
por si amenaza una tormenta
cerca de ti
la noche
arquea
su espinazo vialáctico
y expone sus silencios
toboganes de tiempo
evidencia encantada
de lo que somos
o fuimos algún día
cerca de vos
mi corazón baraja sus asuntos
y me convoca
a una mano de truco
señas caracoleando
y el aire es un misterio
cerca de vos
se escuchan las canciones
robadas en un beso
bajo lunas de trigo de diciembre
y en las playas
donde el deseo arde
y se consume cara al cielo
cerca de vos
el mundo se ensancha
inaugura bahías
no previstas
con caracoles fabulosos
con caracoles fabulosos
y olas pituitarias
cerca de vos
ya no pesan los nombres
ni los apellidos
y sospecho también
que la vida me anuncia
algún estremecimiento
navegaciones azarosas
y aventuras
entonces busco excusas
para volver
a estos territorios
donde tu risa
me aliviana
de tanta piedra pómez
y tanto filamento
cerca de vos
se me antoja
así muy de repente
darle la vuelta al mundo
sin olvidarme claro
del detalle
de invitarte en tiempo y forma
por las dudas
que no te entusiasme
permitirte
tanto nacimiento.
Marzo 8
Me había olvidado
de decirte feliz día
es que había tantos pinos
en el patio girando de alegría
y tanto aire
y tanta risa
yo solo me miraba
como si estuviera
descubriendo
la clave secreta
de tus sueños
hacía tanto
tanto tiempo
que quería decirte
todas estas cosas
que al final
ya te he dicho
me faltaba encontrarte
reconocer el territorio
donde guardas el color de las flores
y el perfume del viento
hacía tanto
que no estaba
tan cerca de mí mismo......
fueron las puentes
que instaló tu mirada
o dibujó tu risa
los caminos colgantes
por donde fui y vine
sin poder creerlo casi
hasta la región
más meridional
de tu alegría.
Verte
Necesito verte en cada muelle
en las hojas de los libros
que prometimos leer bajo los pinos
y allí donde estuviste
preparándote para pescar un sueño
necesito verte
en los lugares que aún no tienen nombre
en los
campanarios de iglesias escondidas
en las bocacalles sorpresivas
en las minas de sal abandonadas
y en los sitios por los que cruza
el viento
necesito verte en el minutero puntualmente
y en el calendario a toda hora
necesito verte
en el presagio
y en los circos trashumantes
y en una estación
con un tren que aún espera
necesito verte
ya esta tarde
y ayer también
por si no vuelvo
en los santuarios
y en las bodegas verte
en los puertos y en las
cafeterías
necesito encontrarte
en los zaguanes
y en la oficina de correos
cruzarme por las calles
con tu risa
y llamarte
y decirte que te quiero.
Necesito verte
Necesito verte
en la cima de un beso
y en esos caminos
donde se cruzan los abrazos
necesito verte
ya y también ahora
y en todos esos momentos
intermedios
necesito verte
entre los pinos
y en una playa
protegida por la luna
en las plazas soleadas
donde aprendiste un día
a jugar a la rayuela
más temprano que tarde
necesito verte
a mediodía también
y a cualquier hora
verte
en un barco a la deriva
y en un aeroplano
recorrer el mundo
procurando
verte en todas partes
en las antípodas
en el altiplano
y en las regiones
donde crece la alegría
quiero decir
como sabrás
Nueva Guinea.
Tu risa
No lo supe de antemano
debo reconocerlo
que el corazón
me iba a quedar así
completamente atlántico
heliocéntrico
desbordante
magnífico y eólico
ni que la vida
me tomaría por asalto
así veraniega
acuática
desnuda
bajo el efecto
de tu risa desatada.
Megadosis de vos
El artista está amparado
por el derecho a exagerar
había dicho Camus
allá por el desierto
mientras escribía “L´homme révolté”
y no sé si es el caso
pero se trata
de una necesidad irrefrenable
de escuchar tu nombre
o imaginarlo
sobre las manzanas compartidas
y en el borde de los caminos
que van a lugares olvidados
o en el techo quizás
y en la luna por sí acaso
escribir tu nombre
en el aire que oxigena la risa
y ventila la esperanza
mientras el tiempo me da chances
de seguir escribiendo
en las nubes vagabundas
tu nombre de mil formas
y en todos los colores
también en los cuadernos
y en los troncos de los árboles
y en los espejos también
tu nombre
sobre los puentes
y en las avenidas
en las pantallas de los cines
y que me disculpen
los espectadores
se trata del artista
y su vocación exagerada
por el arte amor
de robarte la risa
y un abrazo universal
y urgente
casi patriótico diría
después de tanto tiempo.
Encuentro
Se me hace
que estás con ganas
de capoeira
de contorsiones
de malabares y piruetas
donde toda la noche
sean estrellas
y la luna didácticamente luminosa
se aparezca
y te sumes a tanto
desenfreno
se me hace que un viento lejano
atraviesa la llanura de tu corazón
tu territorio nunca entregado
a las manos voraces
que acumulan el tiempo
de los otros
como quien amontona
diamantes o piedras de colores
se me hace
que estallará la risa exacta
para poblar el aire
que edifica la noche
y la noche será como tu risa
entera y fresca
entonces tal vez decida
que sería buena idea
no dormir para nada
y terminar
con tanto desencuentro.
Tren
Un tren
sacudirá tus durmientes
una noche
y bajará
en la estación
el que te ama
y sentirás su perfume
su aliento
su sal en la intemperie
y verás en el cielo
esa mañana
el color de tu alma
de un celeste nuevo
y no mirarás hacia atrás
ni sentirás miedo
de quererme.
Sitios del alma
Íbamos en un auto por el aire
y el aire era la noche
y el mar era el destino
íbamos derramando risas
y tomando cerveza peruana
mis amigas y sus amantes provisorios
y otra amiga conseguida de apuro
para que yo tuviera cabida
en el jolgorio y la noche
no quedara manca o renga
la peruana no hablaba
olía a marihuana, a mango
a incienso olía
y el auto seguía
veloz como los tragos
como el humo de los cigarros caros
que fumaban todos ellos
menos yo y la peruana callada
destinada a ser mi compañía
ingresamos al aire de sal fresca
recorriendo la costa rocosa
del Pacífico
y las risas y las latas de cerveza
se fueron con mis amigas
y sus novios de ocasión
a buscar la forma
de incendiar la calentura
después de unos besos borrachos
y de caricias marineras
nosotros nos quedamos sin hablar
rodeados del mar y sus silencios
aunque ella no entendía
que yo no la buscara
entonces empezó a rastrear
en mi apatía
a buscar signos vulnerables
zonas del destino
caricias perfumadas
que me
alcanzaban
mientras mis amigas a lo lejos
hinchaban el silencio con sus risas
con sus gemidos apagados
después la bruma
el salitre flotando a medianoche
el sabor de la cerveza
bebido de otros labios
palabras inventadas de la nada
su perfume oscuro
y la fiebre azul
y un desenfreno
un poco de deseo
apagándose de pronto
entre las rocas
de una playa lejana
de un país sin milagros.
Canciones espaciales
Si me enamoro de tu risa
y si tu risa fuera un planeta
y yo un astronauta
extraviado e insomne
recalaría seguramente
en tus llanuras
y seríamos como un sólo astro
irradiando canciones espaciales
si me enamoro de tu canto
y me sumo tarareando
o dibujando flores en las servilletas
para homenajear tu música
seguramente haría una reverencia
antes de entregarte mi ofrenda
y sentiría la luz de tu ternura
rozándome la punta de los dedos
si nos sitia la lluvia sorpresiva
y te hago señas
para invitarte a conocer lo nunca
visto
podríamos recorrer la ciudad
y llenarla de graffitis
de color de la alegría
anunciando que la imaginación
ha regresado
y si decidiéramos volar
volar sin ataduras
inaugurar un día nuevo
enteramente claro
habría seguramente
mil pusilánimes
condenando la herejía
después de todo
decidir que la felicidad
sí vale
sí se puede
sí se lucha
es condenarlos
a recordarles su condición
abyecta
estulta
de mareados
de perdidos
de entregados en cuerpo y alma
a la derrota.
Encuentros
Nuestros encuentros son así
criaturas frágiles, volátiles
lagartijas veloces de colores instantáneos
víctimas de las sorpresas
de mediodías a destiempo
o noches iluminadas por sorpresa
visitantes pegajosos
urticarias
y otras reacciones mucho menos epidérmicas
de pronto nuestra charla crece
nos acomodamos
para dar un paso
a otra zona del sentido
o a otra altura
de la magia
cuando llega alguien
así de pronto sin aviso
afinando un instrumento cadavérico
o un experto en caballos y en bocinas
gente así que se proclama amiga
y bosteza, vuelca el café
y se tira a dormir
sobre la mesa del bar
donde empezábamos
a hablar
de lo bueno que sería
estar solos
y descubrir la trastienda
de tus locuras o las mías
puestas a elaborar
historias y películas
en el más puro y singular
continente de estas noches.
Creer
Podría creer
que era un sueño
que te dibujaba
allí a mi lado
o que tu sonrisa
no era sino
mi voluntad de adivinarte
mi sed holográfica
proyectada en tu alegría
podría pensar
que eran tan sólo
verdades pasajeras
el destino
dos o tres mundos
desarmados y a la venta
etapas transitorias
preparando un fuga
evitando un naufragio
pero vos estabas ahí
de una manera más luminosa
que mis noches perdidas
hablando de tus sueños
mientras yo buscaba
la forma de decirte
lo bueno que sería
un encuentro mano a mano
para dejar que el sol
o la luna
decidan
el destino final
de nuestra historia.
Escala de Richter
No era la soledad de las montañas de Oregon
ni la nada salitrosa de Atacama
ni las alturas áridas del país de Kiarostami
ni las cordilleras glaciares de Kamchatka
no hubo derrumbes a la vista
ni torres colapsándose en el polvo
ni tsunamis
creciendo mar afuera
ni ciudades caídas en el estupor y en el estruendo
fue un terremoto íntimo
un sacudimiento repentino
un dislocamiento de las placas tectónicas del alma
una luz oscura subiendo por las piedras del silencio
una marea, un temblor,
un horizonte
quemándose en el viento
y vos ahí en el epicentro
serenamente élfica
desplegando un plumaje paradójico
un lenguaje de colores y de siglos
conmoviendo mis certezas vanas
demoliendo estatuas de miedo
y agonía.
Arte
Tomar partido
y darlo todo si es preciso
caminar por
campos arrasados
cielos partidos
sangre olvidada
retos del arte de ser hombres
arena en llamas
a veces
tanta agua.
Perdón
Perdoname
los ojos dados vuelta
hacia la nada
el amor seco
las manos empapadas
de ceniza
perdoname
la mirada en el barro
la ingratitud
por tanta vida
perdoname
la niebla en la mañana
la indecisión en la batalla
el frágil destino
de mis huesos.
La Chola
Venías del paraje aquel
cerritos y llanuras
vacas pintadas silenciosas
ovejas flotando como nubes
en el cielo verde de palmeras
tenías ganas de dar vuelta al mundo
de dibujar sus rincones sutiles
de hablar con todos
de brindar con todos
¡viva el tequila ahora!
¡que venga el Pepe Guerra!
¡que vengan los amigos de Valizas!
¡que al galope llegue don Aladino
y su descendencia numerosa!
¡que Lopéz Blanquet abra
otra vez el camino
y que lo cierre para que nadie
conozca el paraíso!
¡salud por los médanos azules!
¡salud las dunas de los indios
tan altas como la luna!
¡salud ombúes milagrosos!
tenías Chola
que venir a cada esquina
donde pasaba el viento
el viento panadero
y el humo del asado
el olor del mar de fondo
el viento de la tarde
virazón y bacalao y camarones
en salmuera
venías con el aire entre las manos
como espadas
como ramos de algo nuevo
y en cada puerta dejaste
un pez y una bandera
un pan de nuez y una sandía
un plato de cerámica
con el sol encendido en el centro
y las gaviotas
y las gaviotas
y las primeras nubes
del verano.
Disculpas en el viento
Perdoname los árboles sin sombra
el agua evaporada
los platos quebrados
las muecas del espanto
secas en el polvo
perdoname
el estar y el no estar
el llegar y el partir
el no saber saborear
el pan de esta mañana
y el rumiar sin descanso
las migas amargas
de olvidos urticantes
perdoname
el jugo de cactus
en los labios
las nubes
en la frente
perdoname por no poder pararme
en mi estatura
por ser horizontal
por ser oblicuo
sinuosamente triste
y sin sombrero.
Del silencio
Espero del silencio
y de sus matices difusos
algo que le ponga nombre
el desencanto
sólo el viento nos anima
sólo las olas del aire
nos despeinan sin tregua
mantienen vivos a los árboles
abanican la luz
fija en las flores
derramada en los desiertos
perdida o en fuga en el
espacio
el que pide sentido
tendrá que esperar seguramente
mientras tanto
el día se estira
como un gato al sol
como la risa
de los que ya no esperan.
Contemporáneo
Ay este tiempo
esta asfixia, este terciopelo
esta manera manirrota
de ser tan narcisista
de creernos de todo un poco
casi criaturas del Olimpo
mientras los otros
pobres desgraciados desvalidos
hombres y mujeres del pasado
y del futuro también nadie lo dude
se hunden en el barro
de la insignificancia
de nada sirven sino tienen
la gloria
la cumbre, la magnífica dicha
de ser modernos
de habitar con orgullo rabioso
la calidad acerada del presente
renovado siempre
como la mejor vidriera
arrojando a un costado
todo lo que no sea plata en mano
cash ahora y más
se trata de dinero
capital nuestro que estas
en los bancos
y en la mirada turbia
de los mandamases,
genuflexos mandriles geopolíticos.
Circunstancia
Yo soy este insomnio
buscando estrellas escondidas
esta sed extraviada
en el agua que no para
yo soy esta tristeza
que el viento no se lleva
este puente colgante
entre tu adiós y el mío
yo soy esto frágil
esto remoto
esto que cruza los desiertos
buscando primaveras
yo soy la alquimia
de las flores
inventando colores imposibles
donde sólo hay silencios
yo soy el peregrino
el que no puede detenerse
el que sabe que tu sonrisa pasajera
es la única eternidad
el único trampolín
la piedrita azul
en un collar Moebius
infinito
yo soy la Cruz del Sur
que se contempla
lo descarnado
el hueso dolorido
yo soy el navegante
siempre desconfiado
de las brújulas
cada vez más fiel
a sus instintos
yo soy esto que explora
en los cofres de palabras
procurando mapas de la risa
planos de sueños malheridos
túneles para llegar a tu mirada
recetas de postres olvidados
o la jugada genial
que cambie el resultado del partido
en el último minuto
quien te dice
yo soy esto que se quiebra
y esto resiliente
esto que cree y que no sabe
esto que te espera y huye
esto que regresa a los sitios conocidos
siempre distintos a si mismos
yo soy esta oscuridad
con fe en el mediodía
yo soy esta pasión
esta porfía y esta
circunstancia
yo soy estas preguntas
que no amainan
y algunas respuestas que no llegan
yo soy esto con vocación
por encontrarte
perdida en la holografía de tus sueños
yo soy este soldado
buscando una guerra a su medida
yo soy esta paz que nunca llega
detrás de mil banderas blancas
yo soy siempre yo, pero soy otros
que laten o dormitan en mí
cuando creo que gano
o sé que pierdo
yo soy este país ingobernable
esta manera azul
de entrever el horizonte
en medio de la niebla.
Libertad
Libertad
es una sospecha permanente
en los ojos
de algunos desconfiados
una palabra pintada
de colores
en la bandera
de los somnolientos
libertad
es un motivo
para estar en guardia
para no entregarse nunca
todavía
libertad
es que siempre habrá viento
es que siempre habrá fuego
para arrasar
la mentira reseca
e iluminar olvidos
permanentes
libertad
es el sol
mas allá de la niebla
libertad
es quedarse a luchar
es tener ganas
es sonreír también
para adentro
y querernos
ver cada día
más cerca
de las estrellas
que aprendimos
a admirar
cuando éramos niños.
Resistencias
Resistir el miedo a tener miedo
resistir las resistencias
resistirlo todo cuando ya no se resiste nada
resistir de pie y de cabeza
resistir llorando y riendo resisitir
resistir para ser y para dejar que sean
resistir el insomnio y resistir el sueño
resistir a los pesimistas patológicos y a los
optimistas de entrecasa
resistir la pereza y dar la cara al desafío
resistir la inercia, enderezar el rumbo
resistir el amor y sus cantos de sirena
resistir la ilusión de los dioses y los semidioses
resistir la tentación de cortar por lo sano
resistir sobre todo
el creernos que somos el centro del universo
y dedicarnos más a disfrutarlo y a cuidarlo
resistir la tentación de vivir como esclavos
cebados y cómodos a buen resguardo
de las inquietudes de la duda y la zozobra.
Bandada 1982
El invierno tenía ventanales
pasillos grisísimos
manchas blancas y movientes
en el hospital grande como un barco
como un barco derrotado en la neblina
subíamos sin zapatear
sin hacer ruido
perforando madrugadas
evitando a los milicos
trepados en los árboles
en las orejas de los edificios
en el fondo de los tachos
de basura hospitalaria
entrábamos saliendo del aire
náufrago de la noche
llevábamos la vida
escrita de miles de volantes
de aviones parlantes
declaraciones de guerra
a tanta dictadura
íbamos sonriendo
con los dientes apretados
mirando en redondo
calibrando el peligro
celebrando la lucha
subíamos las escaleras
piso por piso
sólo los rumores clásicos
camillas o lamentos
y allá arriba
vaciábamos cómplices el portafolio
repleto de palabras voladoras
escritas como sonrisas
en un pequeño cuarto
en una pequeña imprenta casera
“Liberar a todos los presos políticos”
volaban aleteando
“Abajo la dictadura”
en cada piso
se posaban
y en la mañana
había bandadas
de libertad
de ya basta
de aquí estamos
compañeros.
Masacre
Muertos
redondamente muertos
como perros sin suerte ni epitafio
carne seca del desierto
estopa mórbida
dos muchachos masacrados
en un agujero
que pudo ser una trinchera
ayer estaban vivos
anteayer despidieron
victoriosos
doloridos de pánico
gloriosamente gregarios
con una soledad atroz doliéndole en los
huesos
hoy están muertos
muertos de pura guerra
de pura absurda guerra
fuego carnicero
carcomiendo los hígados
despejando el terreno
de todo aquello
que se oponga
a la conquista
hay dos muchachos muertos
como si no hubiera otra cosa que la muerte
con los ojos quemados
y el cerebro partido
sin vientre
perforados
dormidos para siempre
ayer caminaban seguramente
por esos lugares
donde jugaban cuando niños
allí donde sentían el llamado
desde su mezquita
estaban aún vivos
esplendorosamente vivos
angustiosamente frágiles
hoy están muertos
colosalmente acabados
secos
tapados de polvo sangre seca y asco
de soberbia imperialista
de peste invasora
de avaricia diez mil veces maldita
de nada sirvió a último momento
levantar un trapo blanco
derrotado también allí a un costado
no sé si sabían muy bien
por qué luchaban
o si tal vez huían
pero en todo caso era su territorio
su cielo y sus estrellas
a las que no verán ya más
los dos muchachos
como otros tantos miles
de víctimas atroces
huérfanas de compasión o de milagro
quemadas por el ácido
y las bombas
las siniestras y canallescas
las de fuego en el pecho
las del ahogo
las de la gangrena
las que amputan
milimétricamente dirigidas
a defender
el tenebroso
interés compuesto
de las bestias.
Abrir las puertas
Abrir las puertas
los portones
las ventanas baldías
y dejar que entre descalza
la alegría
y que den ganas de bailar
con ella
como con una novia
que nos esperó
después de la tormenta
que bueno
tirar abajo las barreras
que nos encerraron
tanto tiempo
en el charco
cerrado y egoísta
del aturdimiento
y el consumo cosmético
la indiferencia
y el miedo a ser
lo que siempre quisimos
abrir las puertas
y que entre todo el amor
ya es hora
ya basta de espanto
zanjas de despojos
recuerdos de la muerte
y otros estropajos
a veces es tiempo
como ahora
de abrir las puertas
y que todo se ventile
que se aposente el sol
en todos los costados
alegremente en los rincones
en todas las mañanas
y que nos tonifique
después de tanta gripe
de tanta tristeza
y cálculos biliares
abrir todas las puertas
y sacar el miedo
a patadas sin dudarlo.
Los locos
Ah!
Ya vendrán los locos
con su trenes cargados de reptiles
con sus invocaciones
ya se sabe
a los dioses ocultos
a las palabras, sí, a las palabras
como si fueran artilugios
cajas de sorpresas
manos que desatan
vendrán los locos
se huele en el aire
con esas disparatadas risas
sacudiendo telarañas
los estantes de libros no leídos
abriendo una tras otra
las puertas cerradas por el miedo
los cofres de la fe
atados con alambre
vendrán uno por uno
al principio tal vez
imperceptibles
mimetizados
vestidos muy correctamente
saludando
respetando los códigos
de las buenas costumbres sacrosantas
pero no lo duden
en los bolsillos
traerán un arsenal
de palabras prohibidas
y colores disonantes
quemándoles la risa
vendrán con brebajes secretos
para curar todas las muertes
sobre todo la de alma
tan epidémica y global últimamente
se escucha su tropel
su sordo su silencioso
caminar desde todas partes
desde fuera y desde dentro
los locos
los magníficos locos
los mil veces malditos
los destruidos a cabalidad
los resurrectos
siempre resurrectos,
ya vendrán los locos
y no habrá más espacio
para la estupidez
y caerán los candados
como cucarachas secas
y los códigos de seguridad
se esfumarán como por arte de magia
las cerraduras, las llaves
los maleficios de todo orden
sobre todo aquellos que producen
ceguera, renguera, falta crónica de risa
caerán, caerán, caerán,
como caen las estatuas
de los ídolos opacos
cuando vuelva a soplar
insobornable
el viento de la vida
ya vienen los locos
a reírse de todo
magníficamente cuerdos
a no olvidarlo.
Homenaje
Había nacido ya se sabe
para recordarle a la vida
su costado de pan y sangre
la ternura que hay en ser feliz
como sólo ser luz que viaja en otros ojos
o en el aire que aún respira
en tu aliento o en el mío
la tierra le habló temprano
le habló la gente
le habló su corazón
y no se vió sino entre otros como el
que supieron encontrar la forma
la hazaña diaria de responder tantas
preguntas
de amasar tanto pan
y buscar que el sol
entrara en cada casa
donde el trabajo perfumaba
las manos de la gente buena
y hubo que escalar
y recorrer túneles sin tiempo
y subir y caer
y reír y llorar
tragar la sombra
y sanar una y otra vez
de tanta injusticia
de tanta estupidez hiriente
y tanta muerte
pero él creyó
aun cuando
nadie creía
creyó como el hombre
cree en la semilla
creyó en su gente y en sus
compañeros
y salió del horror un día
para abrazar a todos
para escuchar de nuevo
para celebrar la vida
que no cesa
de sorprendernos y desafiaros
como él siempre lo hacía.
Patio universal
En este patio
cabe cómodamente el universo
cabe en microcosmos
y el macrocosmos
la vida media del protón
y otras circunstancias
más o menos sub-atómicas
las pruebas de Alma Ata
los destellos cegadores
de Álamo Gordo
la energía antigua de la luz
la fusión termonuclear
que nos alimenta
exactamente
en este patio donde crece la noche
se instalan altas las estrellas
y regresa la luna
en los naranjos
todo huele a silencio
el aire es más fresco
nadie habla
sólo unos ladridos
dibujaban finitudes marginales
ecos
desdichas imprecisas
en este patio
caben mi alegría
y mi equilibrio
como trofeos
que sólo la noche
que sólo la noche
me reclama
sin decirlo
yo soy de acá
de este increíble caos
familiar y antiguo
el mismo tiempo
universo una expresión
mínima radiación de la materia
episodio consciente de su historia
moléculas endemoniadamente
inteligentes
en este patio
caben las canciones
que un día
el horizonte verá cruzar
como banderas
o caminos
testimonios o trincheras
las verá cruzar
una tras otra
alegres
únicas
cantando siempre, siempre
remontando el miedo y la tristeza.
Conchillas
Dónde están los hombres
dónde están las palas herrumbradas
el sudor del verano
la arena antigua
esperando en las barcazas?
quién arrancó las piedras
quién alineó las paredes
dibujó las puertas y ventanas
quiénes llegaron primero
a aquella playa cóncava
cerca de Conchillas?
quién tripuló las balsas areneras
y rumbo a Buenos Aires cruzó el río
cien noches y cien días
quién desafió la tormenta
de los jueves
el viento de los viernes
el cansancio atroz de los domingos?
quién recordó la tierra
tan lejana, la pobreza íntima
la fe traicionada
en una tierra nada purpúrea
en todo caso?
dónde empezaron a morir
los trenes que antes regresaban
pero que un día no
volvieron nunca al pueblito
del norte de Inglaterra
desde donde partieron un día
buscando el paraíso?
El río
El río es un barco fantasma
oculto tras la niebla
la vida teje sus misterios
allá abajo
silenciosos los cangrejos
perfectos los dorados
los remos sigilosos
abren un tajo en la luz
que protege la piel del agua
de tanto aburrimiento
de tanto aburrimiento
el botero
rescatará una red
casi sin peces
por suerte dirán unos
y por desgracia otros.
Atardecer
Anticlinales
o geodésicas
sincretismo del aire
con el aire
azul
se curva la luz
tangente
directo hacia el origen
rueda de la fortuna
o universo
dunas de arena en llamas
cuevas de sombra
y el asombro
tembladeral donde el lila
se hunde majestuoso
médanos, nácar demolido
pedregal o corales
virazón
colores naufragando
en el silencio gris
que se avecina.
Cuando llega la noche
Cuando llega la noche
y se eleva entre los árboles mágica
yo llego también como un astro perdido
y me sumerjo en la frescura
busco mi ecuación
mi cuadrante
mi hipotenusa en tanto caos
busco en la luz
las trazas del origen
una orientación en la amargura
una constelación
una constelación
que hable de esperanza
cuando llega la noche
y el cielo dilata su llanura de estrellas
lejanas y secretas
me pregunto quienes habrán
buscando refugio
bajo sus destellos friamente remotos
bajo su serenidad
en la locura
bajo su antigua tibieza
en el combate
cuando llega la noche
el aire fresco y alto
me envuelve en sus recuerdos
que a veces son también los míos
de cuando
en los patios
de mis noches
de niño
el cielo nocturno
me cuidaba y guardaba mis secretos
silencios y misterios
profundo me abrazaban
cuando llega la noche
todo comieza
y recomienza
tercamente
y también se va lejos
el tren de los fantasmas diurnos
que me acosa.
Luna Nueva
Flotando
casi escorada
como un barco mareado
sobre una playa
intacta
la luna nueva
inmóvil
a punto de caer
al horizonte
como un pez
en la red
luna nueva,
escudo de armas del amor
arco de equilibrio
nave dibujada en el viento
entre nubes mansas
como fantasmas dormidos
rumbo a no sé donde
un cielo protegido en el silencio
y estrellas que me miran
como viejas conocidas
compañeras fieles
de las noches profundas y claras
y de los insomnios
vigilias
buscándole sentido
a tanto absurdo
robándonos el tiempo
luna nueva
que se inclina a escuchar
a Milton Nascimento
y a todos sus magos
invitados
a veces la dicha es eso
un equilibrio, un encanto instantáneo
una lenta ceremonia sin locuras
suave, intensa, del cielo al corazón
y viceversa
una conexión, antigua y nueva
efímera y eterna
luna nueva.
I
Invierno 1
Los cirrus planean
se vuelven cúmulos cayendo
sobre la desembocadura vaporosa
del Solís.
caen por las barrancas
las últimas sombras
que el sol desaloja
trepando matinal tras la Sierra de las Ánimas
Todo es rumor antiguo
frío oceánico
tiempo detenido
flotando en la espuma
que fraguó la tormenta
Podremos reconocernos
en la primavera
y celebrar
haber vivido estas mañanas
Del invierno sólo quedará entonces
la tibieza interior que enfrentó al frío
la claridad del viento suroeste
el perfume del mar saciando
mi sed de amaneceres.
Invierno 2
El invierno es una casa en el sur
un vendaval abierto, eterno
un soplo antártico
un viento patagónico incansable y terco
el invierno es la noche sin tregua
es una claridad suavemente marítima
es una tormenta interminable
es una lluvia horizontal y lenta
invierno es un regreso a la intemperie
es una convocatoria a resistir
a beber estrellas y lunas ancestrales
el invierno es un destino, un paradero
es abrir puertas, incendiar la madrugada
es tejer bufandas de palabras tan amadas
es tomarse unos tintos de cara a la tormenta
el invierno es juntar a los amigos para celebrar risa
el inviero es una lejanía solar
es una caprichosa inclinación del eje de la tierra
es luz fría y lenta
la nieve, el granizo, el cielo que vuele intacto
el invierno es una lejana estación de la memoria.
Verano 1
El fuego que vuela en los insectos
que devora las tardes
que marchita la sed
como a un papel reseco
el verano leal recostado en las playas
el verano con siestas vaporosas
el fugaz simulacro en la Siberia
o en la Antártida
el verano de carnavales sureños
y fiestas venecianas
las mañanas ardientes
el viento que no llega
el verano caluroso y fijo de los pobres
el amor desplegando sus banderas
nocturnas mariposas
festival de feromonas
vuelo nocturno encendiendo luciérnagas
el regreso sensual
de los jazmines
en tus labios remotos.
Si llueve
Y si llueve desde el sur de las estrellas
un viento frío como la distancia
entre dos infinitos
habrá seguramente
una especie de silencio
a punto de aprovechar
tanta planicie y tanto cielo
tanto aire vacío
e instalarse
como una prueba más
de que Dios es esquivo
y huye de las multitudes
y si llueve entonces
como un bosque que ocupara la noche
con sus perfumes verdes
y sus sombras húmedas
insistirían mis preguntas
en el hueso
de lo deshabitado
ya despojado de todo
desnudo de voces o promesas
algo parecido a una razón
a un florecimiento
una silenciosa y enigmática respuesta
profunda y clara
en la negrura.
Soy
A veces soy lo que no soy
por eso existo
hay días que soy
el ruido de la lluvia
deteniendo las sombras de otro tiempo
soy las acacias
que florecen
en invierno
el rumor de las olas
detrás de las dunas invisibles
a veces soy lo que fui
y ya no soy
me encuentro en esos pinos
que crecían infinitos
perfumados de verano y nubes
cerca de la casa del abuelo
y me pierdo de repente
en días diluidos
acuosos, distantes y neutros.
Quelonio
La luna es una tortuga
navegando en el tiempo de las nubes
reptil de espigas y propóleo
nave,quelonio de azufre
lentitud previsible
torta de maíz para los náufragos
santo y seña
para los que recorren la noche
buscando peces o almas
que navegan sus horas
la luna es una tortuga
sumergida en el tiempo
submarina caparazón de selenio
escudo de escamas y caléndulas
de escoria remota
de sobrante de estrellas sin testigos
la luna es un viaje
alrededor del patio de la noche
un pan de silencio
una brújula de oro
en un mar de madreselvas.
Invierno
El invierno afuera sopla desde siempre
adentro el insomnio
paredes al sol y laberintos
nunca olvido apilar leña
que no nos falte el fuego
ni la luna llena
son buenas consignas
mientras se buscan o se pierden
cosas que en general no existen
Julio en el sur hecho vendaval
agosto se deja llevar
son horas amarillas casi tibias
el perfume de los aromos, dulce
el invierno es una lejanía
es encerrarse en el tiempo
y ver pasar tormentas,
palabras que se apagan en la lluvia.
Quién dijo que agosto
¿Quién dijo que Agosto desposeído
desmantelado, caído en el herrumbre
había renunciado
a la locura?
¿Quién dijo que el invierno que
la fija devoción de las órbitas
que la gravitación y la palidez
de la materia oscura inclinarían a
su favor la lluvia donde se dibuja
como una guitarra tu arcoiris?
¿Qué punto del camino es el destino
donde debería el peregrino
preguntarse si ha llegado?
¿Y si así aún los colores
escapan de las cosas y no regresan
ni siquiera para celebrar
otras despedidas?
¿Quién dijo que la luz de la tarde
no detendrá la lluvia
y volverá el fuego
ardiendo a aquellas playas?
Tiempo
El tiempo incontenible
nos hace repetir a veces
la matriz que nos condena
a ver sólo la superficie
de las cosas
los brillos pasajeros
destellos sin asunto
papel picado
parafernalia hipnótica
alimentado los sedimentos
de los mares del olvido
el tiempo nos lleva a veces
como un cardumen girando sin futuro
en un mar estancado
el tiempo que nos reta
y no da tregua
que nos duerme
o nos despierta
en los derrumbes
o en los cataclismos
en la discontinua aparición
de lo azaroso.
Extravío
Casi todos los caminos
no llevan a ningún lado
coartadas circulares
del regreso
al punto de partida
conversación sin asunto
ni argumento
ruta sin paradas
ni destino
casi todos los caminos
son excusas
para mantenernos caminando
y no mirar la vida cara a cara
cuando caemos
sólo cuando estamos perdidos
y nos duele el vacío
en la mirada
asoma a veces la pregunta
la afilada interrogante
que puede salvarnos
de tanto precipicio.
Foto-grafía
La luz del agua
navega en mi mirada
no soy nada más que una forma
la vibración de esa claridad
que me dibuja
la reverberación
el tacto de las hojas en la lluvia
el secreto de los truenos y el granizo
quemándose en mis manos
la luz
la encrucijada
el principio
del principio
cuando el caos callaba
su furia y su misterio
cuando no había aún partículas
luego vinieron las ráfagas de fotones
no había más que eso
llovizna de energía
somos la transparencia
de un antiguo silencio
los neutrinos espaciales
nos atraviesan en la siesta
o mientras los curas
celebran
los bautismos
las ondas de radio
magnéticas transitan
por mis huesos y tu sangre
las canciones, las palabras
códigos invisibles
perforando la nada
atravesándolo todo
la luz antigua
como el nacimiento
como la muerte de aquello
que fue antes
la luz habita
nuestras noches
construye caminos
taladra túneles
vibrantes cristales submarinos
hilo conductor
tragedia o aventura
la luz que habla
que proclama y que alumbra
iluminándose a si misma
regreso del regreso
foto-grafia.
Fronteras
La muerte es una reja
una barrera de metal erguido
con goznes
que rechinan
abierta
impúdica
un mar reseco
reservorio fantasmal
de almas malheridas
la muerte es lo que no veremos
ceguera
bajo un río de sombras
fe sitiada y solitaria
la muerte es una espina
clavada en lo más hondo
no alcanza con decir que su filo no nos duele
la muerte es una frontera
donde no hay países
es la sed sin mañana
es una montaña
que no remontaremos
es el dibujo de las curvas
de las sinuosas palabras
anunciando el desaliento
es el camino
aunque se disfrace
tan convincentemente
de destino.
Laberintos
La ciudad se ha vuelto
un laberinto
allí busco caminos
atajos para seguir esquivando
la hermosura, la ausencia, la locura
la ciudad es un dibujo
cuyos trazos me atraviesan
donde cada esquina amenaza ser
una trampa sin retorno
y hay nudos en los huesos
y esqueletos partidos de tristeza
y un dolor y una rabia
como semillas que arden y que crecen
todo está igual
el plano de la ciudad es el mismo
solo que cambié los recorridos
oculté los referentes
que hablan de fantasmas
resaca terca del olvido
la ciudad es una escenografía
donde siempre actuamos
comemos y dormimos
y jugamos al amor
o desplegamos estrategias
de odio y de revancha
sólo para comprobar luego
que es lo mismo
el plano está aún intacto
sólo ha cambiado el recorrido
camino mirando las paredes
me concentro en los árboles
atento al cielo voy
sin olvidar las nubes o los pájaros
evito las caras
para no sentir la densa luz hiriéndome
toda la sombra y el cielo del verano
para que no queme el dolor
ni la rabia me consuma
el fracaso terrible del silencio.
Bacterias
Pasan inadvertidas
ocultas en todas las hendiduras
en todos los capilares de la tierra
las bacterias secretas
conocedoras de la paz y de la guerra
vencedoras del tiempo
3500 millones de años no es nada
para estas diminutas maravillas
no hubo cataclismo
que las pusiera fuera de juego
ni un momento
bajo perfil
esa es su política
ni el meteorito
de Tungustka
ni el que descontinuó
a los dinosaurios
golpeando con fuego
de rubidio
la selva lacandona
o sus inmediaciones
más o menos caribeñas
lograron doblegarlas
recónditas
y también omnipresentes
su simplicidad
la puso a salvo
de tanto caos
y da tanta catástrofe astronómica
pasamos la vida sin saber de ellas
sin reconocerlas
como a fantasmas
transdimensionales
mientras ellas por ejemplo
fijan el nitrógeno
que hace que la vida
vegetal tenga chance en
los vastos continentes
los ingenios del mal
las han buscado bien patógenas
y multiplicado sus viveros
para exterminar pueblos enteros
como si fueran
enjambres de langostas
tal vez esa sea
la dura consecuencia
de no tener
en este macro mundo
alguien que las defienda
sólo trascienden
los casos policiales
o los sucesos epidémicos
donde ellas dan cuenta
de algunos de estos advenedizos
humanos recién llegados
al planeta del que siempre
han sido anfitrionas
por derecho propio
y años de servicio
las procariotas
las enquistadas
las sulfúricas
las que sobreviven
en la Antártida
o en los vents cálidos
de la noche marina
las menudas
bacterias
amas y señoras
de esta tierra.
Iceberg
Hay una humanidad oscura
bajo el suelo
fragmentos de cerámica
asteriscos de textos familiares
humildes, llenos de antigua luz
somos una proceción sin fe
los santos enterrados
nos contemplan
lloran y se ríen
hay una humanidad oscura
bajo el suelo
una memoria borrosa
niebla en la niebla
Lucy, las huellas de Koobi Fora
y el lago Laetoli
los cerritos de Rocha
las boleadoras y morteros
en el campo del abuelo
en Feliciano
allá en el Tala
hay una humanidad oscura
bajo el basalto del tiempo
de vez en cuando
se desentierra un puñado
de aquella vieja luz
y los niños y los curiosos todos
se detienen y hay asombro
sólo somos parte
de esa oscuridad enterrada
la punta desolada
de un iceberg
continente azotado
por el viento del olvido.
Recetas vacías
Catálogo de horas
banderas que caducan
ceniza enarbolada
mástiles de tiza
para escribir en el cielo
preguntas
anécdotas
detalles amarillos
retazos de milagro
destellos en la noche
estoy estancado
en un país sin limites
preso en una región sin sombras
mojado
en un desierto absurdo
seco en el fondo
de un mar de furia
estoy aquí
es un dato que pesa
el fuego no se lleva
las ramas secas
en las que me enredo
y caigo
estoy en la pista
el vuelo no despega
el viento huracanado
la rabia
la pura
convicción de que
no hay rumbo
al menos por ahora.
Carreteras
Se van las palabras
por la carretera
se quedan dormidas
entre las guitarras
y buscan refugio en la panza
de los tambores negros
se van peregrinas
y calladas
como buscando
una sombra o un momento
se van de a una
sin decir nada
se van las palabras
como
también un día
se fueron
los amores que no eran más que el viento.
El abuelo
Te reías cada día
y contabas tus historias
contrabandistas y mujeres sinuosas
cruzando la frontera en tu carruaje
y el Cuareim era una fiesta
te reías de todo
y escuchabas en la radio
el programa de los blancos
y plantabas zanahorias
y zapallos y silencios
te reías y nosotros reíamos
llevando de paseo a los perros
bosques de pinos
país de sombras suaves
aromas intensos de resina
verano de arena
y rumor del mar cercano
cerca de Punta Ballena
te reías jugando con nosotros
que te ayudábamos a contar la leña
y juntar piñas
para entibiar la vieja cocina
donde tomabas café negro tan temprano
venías del norte
allá donde las amatistas y las ágatas
sedujeron a tu padre bisabuelo
rubio italiano
nacido en
Panicale
campesino inmigrante
fogonero de sueños
tendiendo rieles para los ingleses ferroviarios
reías y reías
pero un día quedó vacía la casa
donde antes vivía tu risa
y empezaste a llorar
como si te hubieran robando los juguetes
y no pudieras ya plantar tus coliflores
ni alimentar a las gallinas bochincheras
ni inventar macetas con cubiertas malheridas
ni jugar con nosotros
ni llevar a los perros
a bañarse en los charcos frescos
ocultos en el monte
un día se te fueron las ganas de reír
pero yo te recuerdo riendo
como si nunca nada ni nadie
te hubieran podido arrebatar
la risa o el aliento.
Poesía
Poesía es bebernos la luz
cuando otros simplemente la miran
o la suman
o la dejan pasar.
Lluvia
Definitivamente la lluvia es un lenguaje
luz que parpadea en cada gota
música oculta en el silencio
la lluvia es un regreso
una invocación que el tiempo enciende
un cambio de planes nebulosos
la lluvia es el abandono de las calles
la pérdida pertinaz de algún secreto
la mentira del buen tiempo que no llega
la lluvia irrumpe y se va siempre
como una mirada indiferente
como la noche, como el filo
agudo de todos tus recuerdos.
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