El frescor de la cañada enamorada de sus sauces
Las siestas de verano perfumadas de azahares
Los vecinos, los primos, las risas en bandada
trepando las higueras
El olor del tambo, las uñas con tierra después de
la cosecha
Las papas, miniplanetas subterráneos
Jugar con agua, correr con los perros
Ser niños, embarrarnos y beber agua fresca del pozo
de la abuela
Y en la tardecita bichos de luz y los caballos
Ir a buscar las vacas y el ordeñe,
el olor lejano de un horno de ladrillos
La cocina a leña y el pan recién horneado
Pura felicidad y fresias en el aire.
CBL dic/ 2016
♥
ResponderEliminar