Valentina plantando Timbós

Tus manos pequeñas acariciaban la tierra hundían suavemente las semillas de timbó en las macetas del vivero regabas las araucarias y te distraías con las mariposas luego era hora de jugar con agua con tus hermanos y el agua era risa y el día era todo sentido y gracia y alegría Te gustaba mojarte los pies en la orilla del mar y decir 'hola agua' cuando llegabas a la playa correr por sobre los palos que cercaban los médanos y competir por alfajores con tu hermana Un día la vida te llevó a las tierras de nuestros ancestros celtas y te sentiste a gusto y creció tu familia con dos hermosos nietos Ahora es tiempo de volver y yo estaré esperándote del otro lado del mar con todas las flores que me regaló la vida. 

dic.2012